domingo, 9 de junio de 2013

La fiesta de Luisgé

El tiempo se consume, y lo demás no cuenta.

1 comentario:

Ignacio Merino dijo...

Extraordinario y conmovedor artículo de blog, Daniel, que encierra una reseña impecable, una crónica desgarradora sobre el oficio y la vocación de escritor y una extraordinaria fe en la vida, aunque subterránea. Felicidades. De corazón. Escribes como debe escribir un escritor de verdad. Capturando. Amarrando. Conmoviendo. Haciendo del lenguaje maná que cae de una realidad superior en las arenas del desierto. Qué pena que no tengas Facebook. Sería muy beneficioso para ti y para tus lectores.